No habrá momento alguno para detenerme en el camino mientras voy de subida hacia un universo absorto de ideas, o cualquier sentimiento adquirido en el camino, no tendré el valor de dejarte, si quiera de soltarte cuando vaya cuesta arriba mas prometo sujetarte con fuerza cuesta abajo, cuando todas las lunas de aquella galaxia se vengan sobre nosotros, aboliendonos de cualquiera de nuestras pertenencias, experiencias y sensaciones varias de nuestras constelaciones. Hay dos colores en mi mente, me absorben, se juntan nos dejan y sueño!
sueño oh desdichada, tu entereza la cual me abre paso a un lugar extraño, anormal, dentro, en tu cerebro.
Somos diversos, eternos, y tan iguales, tratando de ver...
Trato de pensarme, flotar en el vació y respirar sin miedo, respirar en lo profundo, no podría estar ocurriendo nada igual, dentro de un sueño, disperso, fallido...
Duele.
Camino, vuelo, nado y en un mundo pequeño reitero lo que ocurre en realidad. Vengo de lejos, no eh cambiado, sigo siendo la de las vías, la del anden, la del cuarto azul si así quieres recordarme, te vuelves uno en mil, te vuelves uno de mil, y no me siento aquí, no me siento aquí, dentro de un vació que ah matado de tiempo atrás... Sigo viviendo.
Caleidoscopicas reacciones me abruman, estoy cayendo lento en mil colores, en mil sensaciones, y sigo en cama, sigo enredada en la maraña de sensaciones desde días atras... fuegos, luces, chispas, lluvia... no estoy aquí, no vivo aquí, no siento mas cosas de las que me eh permitido. Y siento el universo... entero.
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