Esa canción me recuerda que hace tiempo existió el día perfecto, en el que nada podía salir mal, incluso estandolo. Todo caminaba hacia donde debía estar y sin pensarlo podría saltar del muro mas alto del mundo, sin pensar podría entregarle todo lo que poseia, mis sueños, tantos recuerdos y un frasco de melancolía que había guardado por años.
Aquel día navegue en estrellas, fuimos uno con la noche y las palabras estaban de mas en cualquier conversación. No cambiaría nada, ni a nadie por aquellos segundos en la estrella mas lejana del universo.
Aquel día navegue en estrellas, fuimos uno con la noche y las palabras estaban de mas en cualquier conversación. No cambiaría nada, ni a nadie por aquellos segundos en la estrella mas lejana del universo.