domingo, 8 de junio de 2008

Madrugada.

No tengo inspiración
Ni nada que contar.

Un nudo me aprieta la garganta
Y una navaja se clava en mi pecho.

El único lugar en el que me siento segura es en mis sueños.
Veo lo que quiero
Y siento lo que mejor me parezca
No siento el viento pero siento tu mirada junto a la mía
Siento que me observas
Y yo, juego entre los arboles a esconderme de ti
Corro bajo la lluvia
Y puedo caminar sobre las nubes
Pensando en que algún día tal vez tú y yo estaremos juntos.
Aprendí a escribirte.
A ti...
Y a nadie más.

Aprendí a quererte
Aprendí a soñarte
Y a no verte más allá
A tocarte sin sentirte.

No quiero que te vayas.
Algún día, tú serás el que borre mis recuerdos.
Para poder amarnos de verdad.

No me siento especial
Aún tengo esa sensación
De rencor hacia todos.

Mis ojos están oscuros
Y el aire que camina por aquí no lo puedo respirar.
Necesito mi desván...

Lo siento sin sentido
Mis palabras están muertas
Y aun
No se donde deje
Lo que tenía.

Maldito mundo sin sentido
Es lo que dicen todos al sentir lo que siento yo.
No tiene caso buscar una felicidad vana de admirarse
No tiene sentido buscar más compañía.

Y te tengo a ti, no necesito más.
Sentí la lluvia bajo mis pies.
Y estas no se vuelven palabras especiales
Solo unas más
Como los cascabeles.
Siento no ser lo que esperabas.



Tal vez algún día pueda comprender que fue lo que paso.



El reloj no espera.
Y yo tengo que hacer algo por solucionar mis problemas.
Pero ahora...



Ahora es hora de dormir una vez más...
Deshacerme de lo que no quiero. Y volver a vivir en mi mente.




EM

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